La Ley de la Propiedad Industrial define “marca” como todo signo visible capaz de distinguir productos o servicios de lo de sus competidores en el mercado. Es un hecho que cualquier negocio comercial o industrial que pretenda tener éxito, debe tener especial cuidado en proteger la marca que le identifica.
Sólo por citar algunos ejemplos, la marca de Coca-Cola, tiene un valor superior a los 83 mil millones de dólares, la de IBM superior a 43 mil millones de dólares, la de Marlboro a los 21 mil millones de dólares, Barbie superior a 3 mil millones de dólares y Yahoo! a mil millones de dólares. Sírvanos esto de marco como punto de referencia del valor que tiene (o que puede llegar a tener) una marca en el mercado.
La Ley de la Propiedad Industrial define "marca" como todo signo visible capaz de distinguir productos o servicios de lo de sus competidores en el mercado. Es un hecho que cualquier negocio comercial o industrial que pretenda tener éxito, debe tener especial cuidado en proteger la marca que le identifica. Los beneficios de proteger, nacional e internacionalmente, su marca son principalmente:
1. conseguir una efectiva diferenciación frente a sus competidores (y con ello lograr la preferencia por sus productos o servicios por parte de los consumidores)
2. evitar que terceros se aprovechen -o perjudiquen- el buen nombre de su negocio.
Existe la creencia de que obtener la autorización por parte de la Secretaría de Relaciones Exteriores para usar una palabra en una denominación social, o registrarla ante el Network Information Center (NIC) México como nombre de dominio otorgan derechos exclusivos sobre la palabra en la denominación o el dominio. Tal creencia es errónea.
Únicamente el registro de una palabra como marca ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) otorga a su titular el derecho a su uso exclusivo y la posibilidad de iniciar acciones administrativas, civiles o penales contra aquellos que la usan sin su autorización.
El proceso para registrar una marca es sencillo, rápido y económico (sobre todo al considerar los beneficios económicos actuales y potenciales que confiere registrarla). El procedimiento completo, siempre que no haya oposición por parte de terceros o que el IMPI cite marcas previamente registradas como impedimento, toma aproximadamente de 7 a 9 meses.
No hace mucho, se pensaba que en México era inútil registrar una marca, pues con mínimas variaciones a la misma ("Sony" y "Sonni"), se evitaban acciones por su uso ilegal. Nada más falso.
Nuestra legislación vigente castiga severamente con multas, pago de daños y perjuicios y en ocasiones extremas incluso con cárcel, no sólo la imitación de una marca, sino también el uso de una "similar en grado de confusión" para identificar, productos o servicios iguales o relacionados con los que protege la marca registrada; así como cualquier intento de confundir a los consumidores aparentando una relación entre una marca establecida y la de un tercero infractor.
Decisiones recientes por parte del IMPI ratifican que en México, la impunidad por el uso ilegítimo de marcas, es cosa del pasado.
Una recomendación, registrar su marca no es suficiente. Es indispensable administrarla,protegerla y tomar acciones decisivas frente a infractores; sólo de este modo logrará otorgarle un valor significativo a la misma, colaborando ello al crecimiento de su negocio y al incremento de sus ventas.